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Las fiestas de fin de año suelen estar asociadas a momentos de alegría y celebración: la Navidad es reconocida como una festividad que abraza la calidez familiar y la noche de Año Nuevo como un encuentro lleno de diversión y nuevos comienzos.

Ahora bien, ¿qué pasa cuando nuestras emociones no encajan en esos ambientes?

Aunque parezca raro sentirse triste durante las festividades es algo completamente normal y más frecuente de lo que pensamos. Hoy en día, es incluso una de las consecuencias de la pandemia global del COVID-19 que nos sigue afectando.

A continuación, te facilitamos algunas herramientas para que puedas gestionar tus emociones en estos momentos de alta demanda para tu salud mental.

Depresión en las fiestas navideñas

Desde pequeños, crecemos con la imagen de la Navidad como una fiesta muy emotiva, ese momento del año donde todos los miembros de la familia se reúnen para compartir un momento significativo juntos. Pero debemos tener en cuenta que no todos llegamos a fin de año de la misma manera y, aunque queramos mucho a nuestra familia, puede suceder que no nos sintamos bien asistiendo a reuniones llenas de gente cuando estamos tristes.

Tener depresión en la época navideña es algo que sucede a menudo y se refleja muchas veces en sentirse abrumado ante las decoraciones festivas o fuera de lugar durante las conversaciones sobre regalos y festejos. Ya sea porque este momento del año nos recuerda la ausencia de algún ser querido o nos trae recuerdos dolorosos de la infancia, no debemos ignorar nuestros sentimientos.

Recomendaciones para afrontar la depresión en Navidad

A continuación, te acercamos algunos tips para la salud mental que pueden ayudarte a aliviar la angustia durante las fiestas:

• Reconoce tus sentimientos. Muchas veces no nos tomamos el tiempo de identificar nuestras emociones y darles el reconocimiento que necesitan. Si estás atravesando una depresión en fin de año, debes darte el tiempo de reconocerla como tal para poder hacer las paces contigo mismo. No es nuestra culpa sentirnos mal ya que no podemos controlar por completo nuestras emociones, es por eso que aceptar lo que nos está pasando es el primer paso para aliviar nuestro sufrimiento.
  
• Respeta tus energías. Si bien la temporada de fiestas está cargada de compromisos sociales e invitaciones a distintos eventos, al tener depresión, no debes forzarte a cumplir con las expectativas de los demás. Dale lugar a tus emociones y evalúa hasta dónde puedes cumplir con tu agenda social para poder reservar algo de energía para los momentos que no puedas evitar y para los que sí quieras presenciar.
  
• Consume con cautela. Es bien sabido que las festividades están asociadas a grandes cantidades de comidas caseras, postres deliciosos y bebidas de todo tipo. Por eso, te recomendamos consumir a consciencia. Respeta los límites de tu cuerpo y permítete darte los gustos que se te antojen sin que se vuelva perjudicial para tu salud. Ten en cuenta que si estás triste, el malestar físico sólo empeorará tu estado emocional.
  
• Continúa tu tratamiento o consulta con un profesional. Si tienes un diagnóstico de depresión clínica no puedes descuidar tu tratamiento, asiste a tus turnos con regularidad y sigue las recomendaciones de tu psicólogo o psiquiatra. Si por el contrario no te encuentras bajo tratamiento pero puedes identificar síntomas asociados a la depresión de manera sostenida en tu vida cotidiana, te recomendamos consultar a un profesional de la salud mental para recibir el asesoramiento adecuado.
  

Tips para disminuir la ansiedad de fin de año

Otro de los problemas emocionales más frecuentes durante diciembre es el estrés causado por todas las responsabilidades que acarrea organizar las fiestas. Si tenemos que planificar la cena, hacer las compras, pensar los regalos y además sostener las tareas diarias de siempre es probable que nos sintamos más alterados o nerviosos de lo normal.

Por eso, te recomendamos que tengas en cuenta los siguientes tips:

• Planifica tus tareas. A principios de diciembre escribe una lista con todo lo que tienes que resolver antes de fin de año. Luego, organiza tus tiempos en función de tus objetivos y trata de mantener lo más posible tu plan inicial. Tener un cronograma que te ayude a organizarte aliviará significativamente la ansiedad que conlleva resolver todo a último momento.
  
• Organiza tu presupuesto. Siguiendo con el punto anterior, para mantenerte organizado en una época de muchos gastos, necesitas un presupuesto. Si bien puede cambiar sobre la marcha, tener una estructura de base te ayudará a evitar gastar más de lo que tienes y por ende, estresarte al respecto.
  
• Habla con tus seres queridos. Si te sientes constantemente ansioso y temes desbordar durante las fiestas, no dudes en hablar con tus seres queridos. Cuéntales lo que estás atravesando y delega responsabilidades para no cargar con todo el peso sobre tus hombros. Recuerda que dejarte acompañar es una manera de cuidar tu salud mental y la de los demás.
  
• Gestiona momentos de relax. Aún si tienes la agenda llena durante todo diciembre, trata de liberar al menos 20 minutos al día para tu bienestar emocional. Ya sea para leer una revista, hacer una meditación guiada o simplemente echarte en el sillón, no dejes de separar un poco de tiempo para ti mismo. Tu mente te agradecerá el descanso aunque sea breve y notarás que tus niveles de ansiedad disminuyen si logras sostener esta rutina en el tiempo.
  
• Abandona tus expectativas. Muchas personas esperan las fiestas de Navidad y Año Nuevo durante todo el año y ansían que todo salga mágicamente bien. Para calmar tu ansiedad, te recomendamos abandonar ese tipo de expectativas. Por más difícil que sea no dejes de intentarlo ya que sí sigues esperando que todo salga a la perfección será realmente difícil disfrutar del momento con todos sus imprevistos.

Pandemia COVID-19: ¿cómo afecta nuestra salud emocional durante las fiestas?

Desde el año pasado nuestras vidas se han visto afectadas por la situación global de la pandemia de coronavirus. Tanto nuestras rutinas como nuestros hábitos cotidianos cambiaron y, en este sentido, las fiestas no están exentas. Muchas personas tienen que pasar las fiestas aisladas por contacto estrecho, en tratamiento por ser positivo de COVID-19 o incluso con duelo por la pérdida de un ser querido por la pandemia.

Recomendaciones para sobrellevar el aislamiento durante las fiestas

Si debes pasar las fiestas aislado por haber dado positivo de COVID o por ser contacto estrecho y tus síntomas son leves o nulos, te recomendamos buscar la manera de adaptar los festejos a tu situación para evitar sentir depresión o angustia. Por ejemplo, intenta festejar aunque sea de manera sencilla con quienes te toque cumplir el aislamiento. Tal vez pueden cocinar algo especial o simplemente ver una película navideña juntos para distraerse. Lo importante es mantenerse ocupado durante el aislamiento y no perder el optimismo a pesar de las dificultades en el día a día.

Festejar Navidad de forma remota

Si te encuentras en aislamiento solo o con pocas personas, lo ideal para cuidar tu salud mental es pasar las fiestas en compañía haciendo una videollamada con el resto de tus seres queridos. Utilizar la tecnología disponible es siempre la mejor manera para sentir cerca a nuestra familia sin importar la distancia. Pueden reunirse todos a la misma hora para cenar juntos o hacer un brindis. También, pueden planificar una ronda de recuerdos navideños para rememorar momentos divertidos de fiestas pasadas.

¿Cómo lidiar con el duelo en las festividades?

Desgraciadamente, no podemos elegir cuándo nos toca atravesar momentos difíciles. Si estas fiestas estás lidiando con la pérdida de un ser querido, lo primero que debes considerar es que está bien no querer festejar. Puedes mantener vivo el recuerdo de esa persona teniendo un momento íntimo con otras personas cercanas, pero no te sientas obligado a participar de los festejos de la manera tradicional. Recuerda respetar tus tiempos ya que los duelos son procesos personales sumamente complejos que deben ser habitados sin presiones externas. El tiempo es tu mejor aliado, ten presente que aunque este año no tengas espíritu festivo quizás el próximo sí lo tendrás.

Conclusión

Sentir tristeza, ansiedad, estrés o depresión durante las festividades es completamente normal.

Lo importante es mantener siempre todos los cuidados posibles y no dejar de lado nuestras necesidades de salud mental. Por eso, te recomendamos adquirir un plan de medicina prepagada  para que puedas tener la tranquilidad de que tanto tú como tus seres queridos estarán protegidos todo el año y especialmente durante las fiestas en este contexto de pandemia global.