El cáncer es la segunda causa de muerte a nivel mundial y es una enfermedad que afecta el entorno familiar, por el desgaste físico y emocional para el paciente y su familia.
La buena noticia es que es posible tomar acciones para prevenir algunos tipos de esta enfermedad. Todo se resume a llevar un estilo de vida saludable que incluye alimentos que nos ayudan a prevenir el cáncer y que son fáciles de conseguir, preparar y además son deliciosos y mejoran la calidad de vida familiar. Todos los alimentos contra el cáncer tienen un papel protector por zonas del cuerpo, por lo que la recomendación es incluirlos en la dieta diaria de forma variada.
El Instituto Americano de Investigación del Cáncer (AICR por sus siglas en inglés) advierte que un 40% de los tumores masculinos y un 60% de los femeninos están relacionados con la mala alimentación y un 30% del total de fallecimientos de esta enfermedad tiene que ver con los deficientes hábitos alimenticios.
Las carnes procesadas, bebidas gaseosas y alcohol son algunos de los alimentos que consumidos en exceso tienen un impacto directo en esta enfermedad, ya que afectan los mecanismos de protección del cuerpo en los tumores.
Estos alimentos son inhibidores de tumores ya que son ricos en fibra, vitaminas, A, C, D y E, calcio, magnesio, entre otros. Además, muchos de ellos son accesibles, por lo que pueden incluirse en la dieta diaria. La mejor forma de hacerlo es creando platos compuestos por proteína, vegetales y carbohidratos, de forma equilibrada. Estos son 10 alimentos para prevenir el cáncer.
El ajo es un superalimento, conocido por sus propiedades antibacterianas y antisépticas. Además, contiene antioxidantes que protegen frente a tipos de cáncer como: estómago, pulmón y mama.
Cereal Centeno
La fibra de este cereal mejora el tránsito intestinal, lo que arrastra sustancias cancerígenas.
Pescados
Mucho se habla del beneficio del pescado y es cierto. En especial el salmón, trucha, caballa y sardina ya que tienen alto contenido de vitamina D y Omega 3, que son clave en la prevención del cáncer de mama, colon y próstata.
Tomate
Esta fruta, rica en licopeno, desintoxica el hígado, reduce el colesterol y previene enfermedades cardiovasculares.
Su consumo frecuente inhibe la aparición de tumores, en especial de pulmón. Es rica en vitamina E, magnesio, saponinas y betacarotenos, que son componentes antioxidantes para proteger al sistema inmunológico de diversas enfermedades.
Cúrcuma
Esta planta tiene una raíz amarilla que se transforma en polvo para condimentar diferentes platos, además de su sabor tiene un efecto protector en el colon, páncreas y esófago.
Setas
Los diferentes tipos de setas (hongos) en especial las versiones asiáticas como shitake, enoki o reishi estimulan el sistema inmunológico.
Zapallo o calabaza
Es un alimento excepcional ya que es un potenciador de la acción de vitaminas, minerales y fibras de frutas y verduras. Su consumo es clave para prevenir el cáncer de próstata, uno de los de mayor incidencia en hombres, en Ecuador.
Aceite de oliva extra virgen
Este aceite, rico en vitamina E y D, es el sello de la cocina mediterránea. Además de su sabor es conocido por sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. De hecho, un estudio de la Universidad de Navarra concluyó que las mujeres que consumen con mayor frecuencia este aceite reducen el riesgo a desarrollar cáncer de mama.
La dieta anticancerígena se trabaja con diversidad de platos. Hay que entender que se debe comer variado y combinar con bebidas que contribuyan a este objetivo, ya que hoy el mercado ofrece cientos de productos carbonatados, tés azucarados, energizantes artificiales, entre otros, que incrementan el riesgo de sufrir enfermedades.
Esta bebida se produce a partir de una planta llamada camellia sinensis de la que se extraen brotes y hojas secas, que en su proceso de marchitado obtienen oxidación por medio de enzimas. Cada variedad de té (negro, verde, blanco, rojo o azul) tiene un proceso y sabor distinto, pero se asemejan en que contienen polifenoles y teaflavinas que son antioxidantes y benefician al sistema inmunológico.
En el tema del té hay que entender qué tipo de té se está tomando. Existen tés embotellados que contienen grandes cantidades de azúcar y esto es perjudicial para la salud. Lo mejor es consumir el té en bolsas o al peso y prepararlo sin endulzantes en casa, para aprovechar sus componentes nutricionales.
El organismo está compuesto por un 70% de agua, lo que lo hace un elemento indispensable para estar sano. De hecho, hay estudios que indican que el consumo diario de agua reduce el riesgo de cáncer de colon y vejiga.
El kale o col rizada es un súper alimento. Según el Instituto Americano para la Investigación del Cáncer, los carotenoides que contiene este vegetal (y otras de hojas verdes) pueden inhibir el crecimiento de células de cáncer de mama, piel, pulmón y estómago. La recomendación es añadir a los ingredientes de un batido, una porción de estas hojas verdes. Se lo puede mezclar con jugo de naranja natural, manzana u otra fruta.
La mejor forma de protegerse contra el cáncer es tener un estilo de vida saludable. Sin embargo, hay que tener un respaldo por si ocurriera algo. La cobertura médica es necesaria para no afectar el patrimonio familiar y tener tranquilidad.
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