El smartwatch hace unos años era usado más que todo por deportistas de alto rendimiento, pero hoy se ha democratizado su uso y es una pieza necesaria para la actividad física.
El reloj inteligente se ha convertido en una extensión del celular que permite recibir mensajes, visualizar notificaciones y tener información sobre la frecuencia cardiaca y otros indicadores de salud, que hacen del reloj inteligente una herramienta clave para monitorear el bienestar de los usuarios. Esta es una guía sobre las ventajas de usar un smartwatch para realizar actividad física:
Muchos smartwatch permiten medir el ritmo cardíaco para controlar la intensidad de los entrenamientos y dar pautas de movimiento para mejorar el estado físico. Los relojes Garmin, por ejemplo, integran sensores ópticos en su reverso que monitorean la frecuencia cardiaca. Dichos sensores usan LED y fotodiodos. Por un lado los LED iluminan la piel a unos milímetros, donde la sangre se refleja y así el reloj Garmin calcula la velocidad de flujo sanguíneo y por ende la frecuencia cardiaca.
Algunos smartwatch están para apoyarte en la consecución de resultados, tanto la disminución de peso, como mejorar el estado físico. Al configurar el reloj te va a solicitar datos como la estatura, peso actual, entre otros para medir y personalizar el plan de entrenamiento según tus necesidades.
Los relojes inteligentes, en especial los Garmin, son compatibles con planes de entrenamiento de Garmin Coach, que ofrece planes de entrenamientos gratis, según las necesidades específicas del usuario.
Algunos relojes inteligentes monitorean el sueño, lo que permite los hábitos al descansar. Eso implica saber el sueño profundo, REM (Rapid Eye Movement), sueño ligero y los tiempos de insomnio, para medir el impacto del descanso nocturno que es clave para tener una buena salud física y mental.
Para los amantes de los datos, los relojes inteligentes cuentan con apps dotadas con tableros que tienen toda la información en tiempo real necesaria que refleja el estilo de vida de una persona: frecuencia cardiaca, promedio de ésta, pasos que ha dado en el día, calorías quemadas, calorías activas (aquellas que se queman en una actividad física) y calorías totales incluyen las activas y aquellas que se queman con la rutina diaria: cocinar, moverse por la casa u oficina, pensar, etc.
Hacer ejercicio es para desconectarse, pero a veces es importante saber qué ocurre y acceder a un dispositivo sencillo, más simple que el celular. El reloj es perfecto porque solo hay que verlo de reojo, sin desconectarse, para saber qué mail llegó o estar al día en las actualizaciones en redes sociales. Si quieres desconectarte por completo, puedes deshabilitar esa función para solo concentrarte en la actividad física.