Nada mejor para celebrar el mes de la mujer, que teniendo la certeza de estar saludable. Para esto hay que seguir ciertos consejos de nutrición y actividad física. También hay que realizarse una serie de exámenes para detectar cualquier anomalía que afecta a las mujeres y hacer un tratamiento preventivo eficaz.
Ser mujer implica una serie de retos para estar saludable, porque en ocasiones al ser el epicentro de la familia es difícil tener tiempo para cuidarse en el día a día. Sin embargo, hay formas de mejorar hábitos para tener una vida más saludable.
Los chequeos de rutina, como los ginecológicos, son clave para prevenir cualquier enfermedad que podría ser grave. Es necesario coordinar estas visitas una vez al año y no dejar que la dinámica familiar detengan este propósito. Por eso hay que conversar en casa y coordinar estas citas para que ningún otro acontecimiento se cruce.
Con las actividades del día a día es fácil poner excusas para evitar el ejercicio. La verdad es que incluir actividad física es clave para reducir el riesgo de cáncer y otras enfermedades como la diabetes y enfermedades cardiovasculares. Solo requiere un poco de voluntad y ganas de ser más saludable.
Una dieta equilibrada es la clave para la longevidad. Para lograrlo existe la teoría de los colores que se basa en mezclar vegetales, frutas, hortalizas y verduras de diferentes colores. Cada tonalidad, generada por los pigmentos, representa un grupo de nutrientes que mejoran ciertas funciones y algunos alimentos son un escudo contra el cáncer.
Alimentos de color rojo
Estos son un poderoso anticancerígeno ya que contienen licopeno, que está en el tomate, pimiento rojo, cerezas, fresas y rábano. Además reduce el colesterol, lo que beneficia la salud cardiovascular.
Alimentos de color amarillo
Son aliados para mantener huesos fuertes, piel sana y benefician la vista, ya que contienen betacaroteno. Se encuentran en zanahorias, mango, piña, pimiento amarillo...
Alimentos de color verde
Ricos en ácido fólico, magnesio y vitaminas C y K tienen un beneficio inmediato ya que evitan el estreñimiento. Asimismo, si se incluyen en la dieta diaria reducen el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Se encuentran en el brócoli, espinaca, espárragos, acelga, kiwi, entre otros.
Alimentos color azul o morado
Tienen propiedades antienvejecimiento por su alto contenido en antioxidantes. Justo este poder los hace un superalimento contra el cáncer y un aliado para prevenir enfermedades cardiovasculares. En este grupo están los arándanos, remolacha, berenjena y ciruelas.
Además de la alimentación y ejercicio, los exámenes de control son importantes para tener un panorama claro de lo que ocurre en el organismo y reaccionar en caso de cualquier eventualidad. Aquí te contamos algunos de los exámenes que toda mujer debe realizarse.
Este examen es necesario para detectar un tipo de cáncer que se produce por el Virus Papiloma Humano, que es una enfermedad de transmisión sexual. La recomendación es que las mujeres entre 24 y 64 años se realicen este chequeo de forma anual, según los factores de riesgo.
No es un examen rutinario, pero sí sirve para apoyar exámenes en caso de encontrar alguna anomalía uterina. No es para asustarse, solo es un examen para ver el panorama general de la salud de la paciente en esta zona.
Este examen es clave para diagnosticar el cáncer de mama y tomar acciones preventivas que salvan vidas. Esta evaluación debe realizarse según lo que disponga el especialista y está determinado por los factores de riesgo del paciente, como antecedentes familiares.
Visitar al ginecólogo es importante para prevenir diferentes tipos de cáncer, que es una realidad en Ecuador. Ya que este especialista define, según tacto y comportamiento de la actividad sexual, qué tipos de exámenes debe hacerse para descartar cualquier complicación en el futuro. Para cumplir con este propósito, las citas con el ginecólogo deben hacerse una vez al año desde que comienza la vida sexual del paciente y realizarse los exámenes pertinentes para descartar patologías en los ovarios, trompas de falopio, etc.
Ser mujer es un reto porque implica, muchas veces, ser el pilar de la familia, y para serlo hay que cuidarse. No se trata solo de comer bien, hacer ejercicio y realizar chequeos de rutina, sino de tener un equilibrio en mente y cuerpo. Para eso hay que dedicarse tiempo para cumplir metas personales.