Si los colaboradores se conectan desde la casa, ¿cómo podemos medir su nivel de ausentismo? la respuesta está en la medición de resultados más que estar en un lugar físico, cumpliendo un horarios.
El teletrabajo ha crecido de forma exponencial durante la pandemia. De hecho, antes ya venía creciendo a buen ritmo, ya que entre 2005 y 2017, hubo un aumento del 159% en el trabajo remoto. Para febrero del 2020, según un estudio de FlexJobs y Global Workplace Analytics, ese número estaba en 4.7 millones, o 3.4% de la población estadounidense, pero seguro esa cifra ha escalado en el contexto actual y eso genera nuevos retos para las empresas en su estructura, que debe ir hacia un cambio de mentalidad.
Una de las grandes preocupaciones en el entorno laboral, antes del COVID-19, era el ausentismo y cómo éste impactaba en la productividad en la empresa. Sin embargo, ahora que muchas organizaciones han apostado por el teletrabajo es necesario medir este factor de forma diferente.
Las áreas que se quedan en casa necesitan enfocarse en cumplimiento de objetivos y crear esquemas para medirlos a través de KPIs (Key Performance Indicator, por sus siglas en inglés) que en español significa Clave o Medidor de Desempeño. Se trata de una serie de métricas que sintetizan información sobre la productividad en las acciones para tomar mejores decisiones direccionadas a mejorar resultados.
Los KPIs -que normalmente son usados en áreas de marketing- también pueden ser usados en áreas comerciales, contabilizando cantidad de potenciales clientes, cierres efectivos, ticket promedio y ventas totales. Asimismo, en los departamentos de servicio al cliente en el que se miden cantidad de usuarios atendidos, usuarios felices, detractores y los neutros, para entender qué está pasando con el servicio.
Cuando hay una estructura de medición de objetivos, el hecho de que una persona esté o no en su sitio de trabajo no importa. Lo que cobra relevancia es cómo de desempeña y si cumple el propósito de su labor, que debe ser expresada cuantitativa. La cualitativa, en cambio, es más por su capacidad de trabajo en equipo, colaboración, entre otras actitudes que son importantes dentro de una organización, y deben ser evaluadas por Talento Humano.
Aún con los colaboradores conectados remotamente es clave medir el bienestar y obviamente el absentismo. En el caso del bienestar es importante entender qué pasa con cada empleado, qué lo motiva o desmotiva, y en especial de qué se enferma, para comprender qué puede estar fallando. Algo importante es que Talento Humano se enfoque en que los colaboradores tengan en sus hogares espacios designados con sillas ergonómicas para evitar dolencias de cadera, piernas y espalda.
No es un secreto que la salud es clave para mejorar la satisfacción de los empleados, así estén en las instalaciones físicas de la empresa o trabajando de forma remota. En este contexto, un plan de medicina prepagada para los empleados, según las necesidades de las diferentes áreas, es clave para mejorar el ambiente laboral.
SmartPlan es un plan empresarial que combina las coberturas médicas con la tecnología ya que tiene un portal (llamado Smart) que permite tener un control de reportes por grupos de colaboradores a un solo clic. Se puede conocer la siniestralidad, los diagnósticos frecuentes y reporte de liquidaciones, para identificar qué se puede mejorar para aplicar planes de mejora para la salud de los colaboradores.
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